Los índices de obesidad continúan subiendo en América Latina. Más de 2.5 millones de menores sufren de sobrepeso en Sudamérica y se estima que un tercio de adolescentes tienen el mismo problema. Por su parte, Argentina es el país con más hombres adultos obesos (26.7 %), seguido por Chile (24.8 %), Bahamas (24.6 %) y México (23.7 %). Mientras tanto, Japón sólo el 3.5 % del total de la población es obesa.
Destacando como siempre, los japoneses son una autoridad en el tema de salud y nutrición. Más que un método, se trata de un estilo de vida, por lo que cada una de las razones sólo es parte de un gran rompecabezas que ha logrado convertir a Japón en el mejor ejemplo de un país saludable, por lo menos en términos alimenticios.
Comen sano
Esto puede resultar obvio, pero la diferencia entre lo que comemos en todo América y Japón es crucial. En las grandes ciudades la gente tiene más sobrepeso porque no tienen tiempo de cocinar en casa y terminan comiendo en la calle o en cadenas de comida rápida que llenan de calorías y transgénicos su cuerpo en pocas mordidas. En Japón la gente también come fuera -y realmente trabajan más que nadie-, pero las opciones son mucho más saludables que en América.
Su dieta es rica en arroz, pero incluso el arroz que cocinan está libre de trigo. También comen mucho pescado y tés sin azúcar. Una máquina expendedora en Japón ofrece gran variedad de bebidas sin azúcar ni gasificadas, mientras que en América Latina en general una máquina expendedora sólo ofrece refrescos, tés azucarados y agua.
Las porciones son más pequeñas
Algo que al principio molesta a muchos turistas, sobre todo a los estadounidenses que visitan Japón, es el tamaño de las porciones. Fuera del ramen que puede ser un platillo gigantesco, la comida suele ser bastante pequeña.
En Japón un refresco grande en alguna cadena de comida rápida es más pequeño que el vaso mediano en Estados Unidos, y una hamburguesa normalmente parece la del menú de niños de cualquier restaurante de este continente.
La educación nutricional importa
Los almuerzos en las escuelas de Japón son creados por nutriólogos y chefs, y constituye una parte muy importante en la vida de los alumnos. Ellos aprenden acerca de lo que comen e incluso los mismos alumnos sirven el almuerzo.
Caminan
Aunque Tokio no representa a todo el país, la situación es similar por todas las islas japonesas. La gente casi no tiene autos. Gracias al eficiente transporte público, viajan en trenes y autobuses, el resto lo caminan, por lo que su cuerpo es mucho más activo que el sedentarismo de muchas personas en grandes ciudades de América Latina.
Es ilegal tener sobrepeso
No verás a nadie siendo arrestado por tener sobrepeso, pero desde 2008 entró en vigor la “Ley Metabo” que busca reducir la obesidad en la población. Esa ley establece que los hombres japoneses entre 40 y 75 años no pueden tener más de 85 centímetros de cintura, mientras que las mujeres no pueden pasar los 90 centímetros.
La Ley Metabo puede multar a compañías y gobiernos locales que no garanticen la accesibilidad a comida sana, así como programas de ejercicio y vida saludable. Por eso muchas empresas en Japón obliga a sus trabajadores a ejercitarse cada mañana antes de pasar horas sentados frente a una computadora.
Sin duda se trata de un problema con el que han luchado por años y se necesita un gran cambio de pensamiento para que un país de América Latina lo haga, pero viendo las estadísticas, es urgente luchar contra la obesidad y bajar los números de infartos, diabetes y embolias provocadas por una mala alimentación.