Archipiélago das Quirimbas: El archipiélago de Quirimbas está compuesto de 32 islas que ofrecen playas de arena blanca, snorkeling en medio de arrecifes de coral y avistamiento de ballenas jorobadas.
Gorongosa National Park: Este legendario parque fue casi destruido durante la guerra civil. Hoy ya en recuperación, Gorongosa da hogar a impalas, warthogs y muchísimas especies de aves.
Montes Chimanimani: A lo largo del borde con Zimbabue se encuentra esta cadena montañosa rica en bosques de caoba y plantas medicinales. Ideal para acampar, caminar y escapar del circuito turístico.
Tofo: Tranquilas aguas de color profundo, arenas blancas y acceso fácil a buenos lugares para practicar diving, hacen de Tofo una buena playa para un par de días, si logras partir.
Inhambane: Una particular mezcla árabe, india y africana se da en este encantador pueblo. Su historia data al menos 10 siglos, lo que lo convierte en uno de los asentamientos más antiguos de la costa.
Ilha de Moçambique: Esta pequeña isla fue un importante puerto comercial árabe. Hoy sus edificios coloniales y diversidad de habitantes, con fuertes lazos islámicos y africanos, la convierten en un lugar muy interesante que visitar.
Ponta de Ouro: Ubicado cerca de la frontera con Sudáfrica, este tranquilo pueblo es hogar de algunas de las mejores playas del país. Además tienes la oportunidad de practicar scuba diving junto a delfines y tortugas.
Lago Niassa: Lago compartido con Malawi, pero que en el lado de Mozambique está mucho menos desarrollado. Ideal para relajarse y aprender a pescar.
Angoche: Un tranquilo pueblo histórico ubicado al norte del país que aún conserva la influencia pre colonial swahili. Ideal para viajar al pasado.
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