miércoles, 11 de octubre de 2017

Esta es la ciudad más caliente del mundo, increíble lo que para NO morir

Debido al calentamiento global y los cambios climáticos provocados por la contaminación el calor ha aumentado muchísimo en todo el planeta y aunque esto es algo que nos ha afectado a todos, existen lugares cuyas consecuencias han sido fatales.

Tal es el caso de Phoenix, Arizona (Estados Unidos), en donde sus habitantes día con día tienen que enfrentarse a una lucha cara a cara con la muerte.

Phoenix es considerado el sitio más caliente sobre la tierra, su temperatura puede al alcanzar hasta los 60 grados centígrados, lo suficiente para matar a cualquiera que se exponga al sol durante un periodo de 10 minutos.

En Arizona el calor es tan extremo que todos los vuelos han sido cancelados porque los aviones no pueden volar en estas temperaturas.
Actualmente es considerado el sitio más caliente sobre la tierra.


Este año las temperaturas han roto todos los récords, pero lo peor de todo es que algunos expertos han asegurado que la situación será mucho peor, por lo que los habitantes han tenido que tomar medidas desesperadas para NO MORIR.

Los botes de basura y objetos de plástico están derritiéndose en las calles. La gente no puede salir de sus casas, pues la posibilidad de morir por un golpe de calor es una realidad que asusta a todos.


Las mascotas que estén en el exterior deben utilizar una especie de zapatos especiales para evitar que se quemen sus patas.


Literalmente, la ciudad se está derritiendo, los señalamientos públicos, las plantas y hasta ciertos autos fabricados con plástico se están cayendo a pedazos a causa del tremendo calor.

Los meteorólogos están impresionados con el clima tan extremo que azota a Arizona durante este verano, una situación que no se puede comparar con ningún otro fenómeno.


Y aunque algunas personas lo han tomado con humor subiendo videos de cómo cocinan un huevo con el sol del mediodía o cómo hornean una galleta con sólo meterla dentro de un auto, la aterradora situación ha obligado a sus habitantes ha utilizar medidas increíbles para poder sobrevivir.

Cuando la gente sale de su casa lo hace siempre con una botella de agua en la mano y un trapo mojado en la frente.

No pueden salir a la calle durante el día, por lo que se han suspendido las clases y el trabajo prácticamente en todo el estado, además la prisión ha mudado a los reos a los patios para que vivan debajo de unas carpas.

La gente no sale de su casa y no conduce su auto, pues las temperaturas al interior de un vehículo pueden provocar un golpe severo de calor.

Como era de esperarse, familias enteras han tenido que ser atendidas de urgencia por casos severos de deshidratación y sobrecalentamiento corporal.

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