Un estudio afirma que el déjà vu no es un fallo, sino un recordatorio a nuestro cerebro de que la memoria funciona.
¿Cuántas veces no hemos pensado que lo que estamos viviendo en ese momento ya lo habíamos vivido? De pronto, la gente se nos queda viendo como si algo nos pasara y a la pregunta «¿Qué tienes?», respondemos: «esto ya lo viví, acabo de tener un déjà vu», pero, ¿cuáles son las razones por las que tenemos estos episodios?
Aunque han pasado miles de años en los que los investigadores han tratado de explicar las causas del déjà vu, parece ser que el investigador Akira O’Connor es el que más cerca está de fundamentarlo, pues indicó a través de un estudio que el dèjá vu simplemente podría ser nuestro cerebro comprobando que la memoria funciona correctamente.
La ciencia indica que el déjà vu no es un fallo de nuestra memoria.
¿Cuántas veces no hemos pensado que lo que estamos viviendo en ese momento ya lo habíamos vivido? De pronto, la gente se nos queda viendo como si algo nos pasara y a la pregunta «¿Qué tienes?», respondemos: «esto ya lo viví, acabo de tener un déjà vu», pero, ¿cuáles son las razones por las que tenemos estos episodios?
Aunque han pasado miles de años en los que los investigadores han tratado de explicar las causas del déjà vu, parece ser que el investigador Akira O’Connor es el que más cerca está de fundamentarlo, pues indicó a través de un estudio que el dèjá vu simplemente podría ser nuestro cerebro comprobando que la memoria funciona correctamente.
La ciencia indica que el déjà vu no es un fallo de nuestra memoria.
En total, participaron 21 personas en el equipo de O’Connor. Los investigadores mostraron a los participantes una serie de imágenes con un tema específico, como si fuera de un mismo campo semántico. Por ejemplo: cama, almohada, sueño, sábana. El tema central que era “dormir” no era revelado a los inmiscuidos.
Posteriormente, lo que hicieron los investigadores fue preguntar a los participantes si les sonaba haber visto alguna palabra que empezara con la letra inicial del tema principal, es decir, la letra “d” de la palabra “dormir”.
Cuando los participantes respondieron que no, entonces se les preguntó si habían escuchado la palabra principal ("dormir"), y dijeron que no, pero que sí les resultaba demasiado familiar. En las imágenes que tomaron del cerebro durante ese proceso, se dieron cuenta que no se activaba ninguna región asociada con la memoria al preguntarles por la palabra principal. Ahí era en donde el déjà vu se activaba.
O’ Connor indicó que lo que ocurre con nuestro cerebro es que, cuando detecta un recuerdo falso, lo busca en la memoria. Si no lo encuentra, se produce un sentimiento de que algo nos resulta un poco familiar. Dicen entonces que, el déjà vu, más que un fallo, se trata de nuestra mente comprobando que el recuerdo es falso, es decir, que no se trata de un recuerdo real.
Cuando los participantes respondieron que no, entonces se les preguntó si habían escuchado la palabra principal ("dormir"), y dijeron que no, pero que sí les resultaba demasiado familiar. En las imágenes que tomaron del cerebro durante ese proceso, se dieron cuenta que no se activaba ninguna región asociada con la memoria al preguntarles por la palabra principal. Ahí era en donde el déjà vu se activaba.
O’ Connor indicó que lo que ocurre con nuestro cerebro es que, cuando detecta un recuerdo falso, lo busca en la memoria. Si no lo encuentra, se produce un sentimiento de que algo nos resulta un poco familiar. Dicen entonces que, el déjà vu, más que un fallo, se trata de nuestra mente comprobando que el recuerdo es falso, es decir, que no se trata de un recuerdo real.
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